martes, 28 de septiembre de 2010

dame

" Dile a tu oído que me escuche cuando miro
Sana mis manos con el roce de tu espalda.
Dame el remedio para no curarme nunca
Es que es tan fácil respirar el aire cuando estás,
Siempre es tan fácil. "

Ricardo Arjona

domingo, 26 de septiembre de 2010

Hoy



Viernes 24/09/2010.

Hoy decidiste ser vos mismo

Hoy me mostraste tu lado más dulce

Hoy me compraste con las palabras más tiernas

que he oído decir.

Hoy me dijiste que sos sólo para mí

Hoy me rozaste delicadamente los labios

Me acariciaste el rostro con sutileza

Me hablaste con la sonrisa

Hoy quise creerte

Hoy quise confiar en que todo aquello es verdad

Hoy intenté crear con mi mirada

Un puente hacia la tuya

Hoy quise que se volvieran una

¿Como hago aun ahora para

No quererte como te quiero?

¿Como hago para bloquearme de nuevo?

¿Son tácticas o era la verdad?

¿Debo creer o debo dudar?

Nunca nada es seguro cuando estas cosas suceden

No hay mente capaz de controlar lo que sienten

Dos almas divagando en el aire

Y tu alma y la mía hoy jugaron

Hoy me divertí estando a tu lado

Hoy sentí que una parte de mi

Se fue con vos

Y que tus besos volvieron a recrear

Esa locura olvidada en mi razón

Aquella que quería callar

Y hoy no hace más que gritar

Que sos perjudicial pero que quiere tenerte

Quiere creer en vos y en tus palabras

Creer en tus abrazos tibios y en que

Jamás se termine esta odisea

Capaz de generar sentimientos prohibidos

Y deseos plenamente locos.

Capaz de derribar mis muros

Y desarmar tu pantalla

Hoy no fue un día mas

Porque sin esperarlo, hoy FUE ESPECIAL.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Cuestión de vanidades



No escuches las palabras que salen de mi boca, no te fíes, no creas todo lo que digo. No soy un ángel pero no sirvo al diablo tampoco. Guardo deseos que no debería tener, creo sorpresas que jamás vas a conocer, porque cuando una princesa baila al filo de un tango seductor, no demuestra sus trucos, pero los realiza.

Si quisiera hablar de tu mirada, no podría decir que es celestial, no podría admitir que debilita mis sentidos, porque detesto mostrar ante tu figura, tal debilidad. Porque estás cruzando la barrera que solía adjudicar a cada palabra, estás violando los códigos de mi resistencia, y ya no logro tenerte lejos, ya no puedo esquivar las balas de tu estrategia. Si tu táctica es quererme, si logra ser tan simple como eso, ¿por qué no puedo creerte?

Tu vanidad es un impulsor para mi orgullo. Aquel orgullo que me lleva a querer poseerte sabiendo que nunca serás mío, sabiendo que amas mas tu libertad que a ti mismo, y eso, mi amigo, es demasiado.

Estoy borrando mis límites, aquellos que me protegían de caer en las trampas, de sentirme ciega por tu luminosidad. Es como si solo me guiaras vos, como si cada partícula de mí quisiera dirigirse directo al sol, dejando atrás los sentidos y la razón.

Tus ojos, cada día, me arrebatan más la conciencia, me sumergen en dudas y alimentan la creencia de que jamás voy a tenerlos sólo para mí. Aunque quiera ser tu única estrella, sólo ves las otras quinientas.

Aunque mi razón se pierda en la constelación, y mi alma se funda en esta adicción, ya no podré restar minutos, ya no podré borrar los besos dados, no podré volver atrás. Ya es tarde para elegir quererte o no. Ya mi visión sólo ve a través de tu velo, el que muestras, el que toco, el que siento. ¿Cuándo notarás que hay más si quisieras probarlo? ¿Cuándo veras que no se trata de ataduras? sino de una deliciosa condena, esa condena que me lleva a lo profundo de tu ego, aquella que me dirige al peligro constante de tenerte cerca, cuando debería tenerte lejos.

Podría si quisiera, navegar en otros soles, probar nuevos amores, y hacerle honor a mi orgullo herido y mal tratado, pero ¿qué conseguiría? Si lo que quiero es estar a tu lado, si lo que busco es tu daño, capaz de provocar tempestades a mis celos, capaz de crear desconocidos deseos.

No creas, de ninguna manera, que mi orgullo no se venga. No pienses que muero por tenerte, pero cree, sí, en que es lo que más me gustaría, lo que mas disfrutaría, poder creerte sin sospechas, poder confiarte mi alma entera.

jueves, 23 de septiembre de 2010

" . Dame un  motivo, un gran motivo
Para no tomar al pie de la letra estas caricias
tremendas, chifladas
Y vamos así, barcos piratas de madrugada
Dame un motivo, solo un motivo
Para no llenarte el cuello de besos fantasmas . "


Iván Noble

miércoles, 22 de septiembre de 2010

lunes, 20 de septiembre de 2010

Caminos Diferentes




Y es así, como cientos de recuerdos

Se consumen en el tiempo

Como una fotografía gastada

Como una canción malinterpretada

Y definitivamente nadie cambiara

El orden de los sucesos

Se ha vuelto una cuestión de causa y efecto

Una historia que se repite

Hasta en los ángulos más exactos

Hasta en la forma en que ya ni una mirada compartimos

Ya ni una sonrisa nos une

Ni siquiera en las lágrimas te encuentro

Ya no sos quien eras, otras cosas te interesan

Te perdiste, nos perdimos

Ya no estamos en un mismo camino

¿Qué nos paso?

¿Vamos a algún lugar o esto se frena acá?

¿Seguimos por la misma senda o ya no hay lugar?

Ya no pretendo cambiarte

No pretendo que estés

No pretendo que seas diferente

Solo pretendo que recuerdes

Que una vez fuimos inseparables

Y que esos años jamás van a irse

Porque aunque hoy nuestros pensamientos sean opuestos

Esta amistad será para siempre inolvidable.

Aunque ya no encuentre tu rostro

Aunque ya no tenga tu mano

Aunque no nos tengas al lado

No nos olvides nunca…


domingo, 19 de septiembre de 2010

Utopía


Cuando dos seres no encuentran la calma siendo complementarios, no queda opción mejor que la distancia y el espacio que los separe en el tiempo para que al menos uno pueda ver el verdadero valor de ese sentimiento universal que ambos se ocupan de desgarrar.

Si intentas que el otro cambie, solo seguís caminando en un desierto esperando encontrar un lago y una flor, esperando lo que no debe esperarse, esperando una reacción, una mínima palabra que pueda darte la esperanza equivocada, y todo sigue girando de la misma manera, para el mismo lado, con los mismos errores y las mismas palabras vacías, llenas de sentido para uno, y completamente ridículas para el otro. Es como un loop, una repetición continua que nunca llega a concluir de una buena manera.


¿Qué se hace entonces cuando esos dos seres no logran entenderse? O cuando uno ni siquiera lo intenta. Algunos quizá sostienen que se debe ser flexible, que lo único que queda para no perderse es adaptarse, aceptar al otro tal cual es, aún con sus defectos. Pero y ¿qué pasa si estas pidiendo un poco de consideración, un poco de comprensión, de empatía?, ¿qué si estas pidiendo un poco de atención?, y ¿qué si sólo queres ser tenido en cuenta? Que el otro se de cuenta de que lo necesitas, que no queres que la amistad se pierda. Quizás en este caso, querer todas esas cosas se vuelve una utopía, algo que jamás vamos a alcanzar si el otro no tiene el mismo concepto que nosotros, si el otro piensa diferente y sostiene su postura hasta el final. Es como si fuera una comunicación entre un mudo y un sordo, jamás pueden llegar a entenderse si uno no escucha y el otro no habla. Y aun si el mudo aprendiera a decir lo que tiene para decir, el sordo aun así no querría escucharlo. Y es eso lo que sucede, nadie quiere ceder, nadie quiere ser flexible, nadie quiere oír ni entender, nadie quiere intentarlo siquiera.

Así es como suelen perderse años de recuerdos y momentos que solo quedan en el aire, valieron la pena, claro que sí, pero quizá es como sucede con cualquier relación, se desgasta, se agota, se consume, se pierde como cuando en el aire vemos volar las hojas, y queres alcanzarlas, queres tenerlas en tus manos, y no se puede, porque las hojas ya son del viento, y esta amistad ya es del destino, ya no es nuestra, ya no somos nosotros, no somos las mismas, nos perdimos, y olvidamos lo que era ser amigas, el compartir momentos que jamás se olvidan, el escuchar, el charlar y entenderse, todo eso se va perdiendo poco a poco, se escurre como el agua. Tal vez, el mudo es como esa gota que tarda en caer, se mantiene, se sostiene, siempre a la espera de lo que necesita oír, siempre intentando expresarse frente a alguien que no quiere mirar, que no quiere oír. Y llega un punto, en que la gota cae, y cuando cae, se pierde entre miles de otras gotas y jamás vuelve a encontrarse, los momentos que se pierden, ya no se recuperan y otras cosas ocupan su lugar. Porque el mudo siempre querrá hablar, pero si nadie lo escucha, ¿vale la pena que lo haga?, aun si gritara en medio de una cornisa, en medio del vacío, ¿su voz se escucharía si no hay nadie que la perciba?

Aunque no podamos ser flexibles como el agua, como esa gotita que fluye, el lago siempre estará lleno de otras cosas, y son ellas las que permanecen más allá de que el agua se acabe. Si hay algo que permanecerá siempre, son los recuerdos, uno a uno, no se perderán aunque esto se desvanezca, aunque los de antes, ya no seamos los mismos…

jueves, 9 de septiembre de 2010

Quiero y no


¿Por qué me da tanto miedo lo que siento? No quiero quererte, no quiero asustarte, no quiero alejarte, no quiero callarme. Quiero sentirte, quiero animarme, quiero poder ir mas allá de los miedos, quiero ir mas allá de mí, quiero estar segura.
Quiero sentir la eternidad con vos, quiero que seas el indicado, quiero hablarte y trazar un camino a tu lado. No me dejes caer, no me dejes perderme, dame la mano y llevame a soñar, que sin tu sonrisa mis días pierden la gracia. Sé que extrañarías mis celos, mis tonterías, mis dudas, mis preguntas y sé que extrañaría tus malas intenciones, tu sonrisa, tu mirada, tus juegos.

No quiero despedirme todavía, no quiero que te vayas. Me da miedo lo que escribo, me da miedo que lo sepas, me da miedo que esto ya no de para mas. Si querés tu libertad, puedo devolvértela, porque nunca fue mía, si tu lugar no es conmigo, no demores la partida, sólo quiero la verdad. Solo quiero saber si este es el final del laberinto, si la aventura terminó, si ya no escucharé tu voz, si ya no te hablaré al oído, si ya no me necesitas, si ya no te tendré, lo quiero saber…


Me creí capaz de que no me importes, creí que mis paredes nunca ibas a voltear, que a mi mundo no podrías entrar, creí que tus palabras nunca me llegarían, creí saberlo todo, creí saber cómo eras, creí saberme fuerte para no sentir, creí poder prohibirte la entrada, pero ya ves cómo confundí la ilusión con realidad, ya ves como me perdí en tu mirada, en tus palabras, y perdí la razón, la sigo perdiendo por vos, cuando la encuentro pienso, pienso y pienso y nada resuelvo, porque la respuesta no está en ella, lo que mas necesito saber, solo puede saberlo el destino.

Pero si es la hora de que juegues la ultima carta, hacelo pronto porque no me quedan mas tácticas, porque a la libertad no sé jugar, porque quise un milagro y comprendí que sólos no llegan, que si decides quedarte puedo dártelo todo, pero que si decides irte, no quiero despedidas…

Susurra despacio la verdad, sé sutil y suave, porque si duele, dolerá pero quiero saberla ya. Si no soy lo que querías, si no soy lo que buscabas, lo quiero saber. Si estoy siendo la equivocada, lo quiero saber. Si querernos no alcanza, lo quiero saber… Aunque sea sin anestesia, aunque el silencio otorgue la respuesta, aunque en el fondo ya lo presienta, lo quiero saber.

Porque te espero y no.
Porque te extraño y no.

Porque me confundo y no.

Porque me pierdo

Te alejo
Te siento

Te quiero, y no.

lunes, 6 de septiembre de 2010

La Razón y el Corazón

“Me miro de reojo el corazón

Y el me sonríe con puntos suspensivos”

Sí, con puntos suspensivos, expectante, divertido, esperando que lo que deba suceder suceda. Pobre, no sabe todavía a lo que lo estoy sometiendo, me sonríe inocente creyendo y sintiendo, espera mi seguridad, mi propio respeto por lo que yo misma siento. No esperaba que lo contradiga, que me vuelva sorda para no escucharlo. Desconoce lo que mi razón le manda, porque intenta sofocarlo, opacarlo, intenta guiarse por el dulce orgullo, por un ego herido que busca en otros lugares lo que el corazón cree haber encontrado ya. Es mi razón, mi cabeza, mis pensamientos, todo lo causante de intentar perderme, de querer evitar lo que el corazón pide a gritos. El sí sabe lo que quiere, él se jugaría el todo por el todo sin siquiera esperar que algo malo pueda suceder. Pero mi cabeza expone las advertencias, lo sobreprotege, no va a dejar que las cosas fluyan con naturalidad, e intentará siempre poner el freno, intentará siempre hallar un pretexto.

El corazón, dicen, tiene razones que la razón desconoce, y sí es cierto. El no piensa en el después, vive en el veremos, disfruta del ahora, a puro sentimiento, no pone trabas, solo intenta liberarse, hacer que sienta lo que va viniendo, intenta arriesgarse sin esperar nada a cambio, solo dar…

Pero la razón, y el corazón, deben convivir el uno con el otro, ambos están dentro de mí. En mi caso, los veo como mis Dr. Jekyll and Mr. Hyde. Uno tan completamente distinto del otro, pero existiendo en conjunto sin poder ser el uno sin el otro.

Es complicado cuando el corazón manda y ni la razón puede contradecirlo, porque afirma, establece, se hace presente, se impone, se hace notar. Cada gesto inconsciente, cada abrazo y cada beso se manifiestan en mi esencia, porque él ya esta allí, porque ese alguien intenta seducirlo. Aun cuando mi razón conoce lo dañino, mi corazón insiste en jugar con ello. ¿Será tan ingenuo de creer que no va a haber daño alguno? O quizá no le interesa. El solo se dedica a sentir, a jugar, a arriesgarse, a romper las reglas y saltear mis propios obstáculos, mis miedos, mis dudas. A el no le interesa dudar, porque en el fondo siempre está seguro de lo que busca, y si lo que buscaba le gustó, se ocupa de grabar una huella que sea difícil de borrar.

Mi razón siempre ha buscado contradecirlo, ha buscado negar sus llamados, pero hoy creo que están siendo muy fuertes, y aun cuando ella intenta no oírlos, sabe que a este round lo pierde por knock out.

Ya no quiero límites, quiero acercarme más y más a mi perdición. Quiero jugar, experimentar, intentar. Quiero callar a mi razón y sólo dejar hablar al corazón. ¿Saldré herida? Sí, tal vez. ¿Sufriré? Sí, es lo más probable, pero si la pregunta fuera otra, si en realidad me preguntara: ¿viviré esto? Hoy respondo que sí, quiero vivirlo, quiero sentirlo, desearlo y enloquecer. Quiero que lo incierto me sorprenda, y poder ser lo suficientemente valiente para luego soportar cualquier dolor. Quiero dejar de inventar pretextos…

Ya no quiero vivir en la comodidad de lo sencillo, quiero conocer lo oculto que hay en él, saber que la luna puede ser mía si así lo quisiera. Saber que esta locura es temporal pero en este caso, no quiero remedios, no quiero la cura, no mientras mi locura sea él. No mientras el veneno sigan siendo sus besos. No mientras este sabor sea tan dulce y tan amargo al mismo tiempo. Aun si esto es un delirio, aun si esto no es real, quiero probarlo y dejarme llevar, quiero besarlo y ya no pensar, quiero quererlo sin son ni san. Quiero hacer esto a mi manera, pero quiero que ésta sea la manera.

Quiero sentir y sólo sentir…

sábado, 4 de septiembre de 2010

Opciones

Si hay algo que admiro, es a este personaje de ficción que nunca tiene miedo de escribir lo que piensa.. Me encanta, personalmente, la forma de expresar sus ideas.. y bueno, lógicamente me gusta mucho la serie también. Quienes leen sabrán por qué subo esta pieza en particular ;)

Carrie Bradshaw - Sex and the city

"Nunca habiamos discutido exclusividad,
pero mientras para mí la idea de ver a otros hombres
hubiera sido como tratar de meter otro vestido
a una maleta ya sobrecargada, él estaba saliendo
felizmente con otras mujeres, como si fuese lo
más normal del mundo.

¿Será que los hombres tienen una innata aversión
a la monogamia?
¿o es más que eso?

Me preguntaba ¿En esta ciudad, con su infinidad
de posibilidades, se ha convertido la monogamia
en algo imposible?

Lo cierto es que creo que en una ciudad con
opciones infinitas no hay nada mejor que saber
que tienes solo una.
"

viernes, 3 de septiembre de 2010

Un poco de inspiración

ECO INTENSO


Intentando silenciar esa voz

Pretendo seguir

Sin darle oídos a lo oculto

Sin saber a donde ir.


¿Cómo se calla a quien vive en mí?

Ese habitante que habla

Cuando más necesito evitarlo

Más se hace oír.


Inventando parches

Pretendo tapar lo que en algún instante

Debe salir.


Pero cómo se hace para

Tapar el sol con un dedo?

Es como intentar tocar el cielo

Con las manos.


Una meta ideal

Plenamente difícil de alcanzar

Un instante fugaz

Que todo lo transforma.


Ecos de un pasado cercano

Que se hacen oír con toda intensidad

Loca intención de sanar

Tan rápido como todo lo que se lleva el mar.


Se que algún día, esta vida llena de momentos

Me va a dar lo necesario

Para hallar el camino

Que sin desvíos ni ecos

Me lleve a vos.


No pretendas encontrarle sentido

Pretende simplemente aceptarlo

Cuando logres convivir con la luna y sus astros

Házmelo saber, yo te acompaño.


Resistir la mentira y la verdad

Soportar el que dirán

Cuando vivir con miedo ya no me haga mal

Cuando lo imposible parezca real

Ahí sabré cuánto me costó llegar a este lugar.


A.E.

Catarsis

SILENCIO Y REALIDAD

“No me interesaba tener que callarme, porque mi voz ya no era lo primordial, cuando la realidad te deja mudo, hay que aceptarla y continuar, ignorar todo lo demás…”


Alguna vez pensaron a dónde va todo lo que no se dice? Lo que se calla, los pensamientos, las ideas, los argumentos, las respuestas, las preguntas, los sentimientos, la bronca, la decepción. A donde va todo aquello que no podemos decir? A donde van los gritos ahogados? La insatisfacción, el ahogo, el desasosiego.

Todo eso se pierde o se transforma?. Yo opto por la segunda, yo creo que todo lo que no es dicho en el momento, o incluso lo que jamás podemos soltar y dejar salir, se transforma en un agujero en el pecho que cada vez crece más.

Es cierto que hay muchas cosas que con palabras no pueden ser explicadas, hay muchos sentimientos y emociones que se manifiestan mejor en actos, en una mirada, en un gesto, un abrazo, una lágrima. Pero, qué se hace con todo aquello que intentamos decir y no decimos? Lo que nos consume y vacía, nos desorienta, nos pierde.

Incluso hoy, me cuesta encontrarme a mí misma, saber qué quiero hacer, calmar un poco ese agujero que late y late y cada día duele un poco más. Quiero que se calle, quiero poder decir todo lo que en mucho tiempo no pude decir, quiero gritar sin que nadie escuche, quiero ser más fuerte y responder, imponer mis opiniones y poder aguantar más de lo que he aguantado hasta ahora. Pero por qué siento que ya no puedo? Por qué me siento tan vacía y sin poder explicarme, expresarme? Por qué me quedo en la nada?. Es algo totalmente difícil de explicar, porque la nada no es estar bien aun queriéndolo, no es estar mal tampoco queriéndolo, la nada es estar perdido, sin rumbo, como en medio de un río sin saber cómo salir, cómo reaccionar, cómo enfrentar las cosas del camino.

Sé que lo que no digo, se termina transformando en algo más, sé que ese “algo” se va a ir algún día, se va a solucionar, como todo lo que tiene solución. Lamentablemente, pude comprobar, que querer terminar con todo de un día para otro, no te lleva a nada, o mejor dicho te lleva a la nada.

La pregunta siempre termina siendo la misma: por qué?.

Todo lleva su tiempo, ya lo sé, y lo he comprobado también, sé que estas sensaciones se van a ir, pero quiero poder cambiar o quizá volver a ser la que era. Una persona cambia, dicen, cuando la vida la hace cambiar, o cuando se lo propone. Bueno, a mi la vida me hizo cambiar, pero ahora quiero ser yo la que se proponga cambiar para estar mejor. Quiero aprender a descargar lo que no digo, aprender a decirlo, a expresarlo de alguna manera, porque eso que no digo se acumula en el cuerpo, se vuelve vacío, se vuelve dolor, se vuelve pérdida.

Creo poder afirmar que he sabido bancármela todos estos meses, pero esta vez tengo que afirmar que ya no me la sé bancar de la misma manera, ya no me siento tan capaz como antes de reprimir cualquier sentimiento, ahora mi cuerpo está hablando, mi cuerpo reacciona por todo lo que mi mente no quiere reaccionar, y no es la mejor manera, pero lo que se oculta, siempre sale, como sea.

Algunos pueden soltarlo en forma de enojo, algunos gritan, discuten, se enfrentan, lloran, ríen, abrazan, se molestan, en fin, algunos saben demostrar lo que sienten. Yo, en cambio, no puedo hacerlo así de fácil, pero sé que como con todo, lo voy a aprender.

Puedo cansarme de todo, de todo lo que me rodea, cansarme de lo que siento, cansarme de mí misma, pero no puedo eliminar a esa parte de mí que vive conmigo, porque aunque así lo quiera, soy yo y tengo que aprender a vivir con eso.

Muchos podrán pensar que es más simple de lo que digo, que es cuestión de desearlo y estarlo. Pero, no es tan fácil cuando se carga un peso distinto. Cuando la historia es distinta. Cuando estabas acostumbrado a tener problemas superfluos, y un día te despertás y te encontras con una encrucijada, te ves perdido sin saber qué rumbo tomar, sin saber cómo reaccionar, te olvidás de cuidarte a vos mismo porque son otras cosas las que importan más. En ese empeño de proteger a un ser querido, perdés la capacidad de cuidarte a vos mismo. No te interesa si tenés que callarte, llorar en un rincón, si tenés que esconderte, si tenés que sacrificar ciertas cosas, porque vos dejaste de ser lo primordial incluso en vos mismo. Y en ese intento de reprimir lo que sabes que te puede hacer daño, en ese intento de querer volver a vivir en una mentira que te hacía feliz, la verdad te pega en la cara, y qué haces? O mejor dicho qué podés hacer?. Nada, tenés que enfrentarla, porque no siempre la realidad nos gusta, y a veces la mente intenta protegernos de lo que nos desagrada, de lo que nos daña. Pero cuando ya no puede protegernos más, el cuerpo habla, te llama la atención y ahí es cuando no nos queda otra que prestársela.

Yo no sé dónde está ahora mi atención, pero sé que no quiero seguir focalizando mis emociones en mi cuerpo, quiero poder ser aunque sea un poquito como era antes. Puede ser quizá una utopía, pero quiero creer en que la voy a alcanzar.



jueves, 2 de septiembre de 2010

Búsqueda del tesoro

Hasta hace unos meses, solía sentir esto que va a continuación. Ahora la historia es otra, pero en algún momento lo sentí, y lo quise plasmar, quizá a otros también le ha sucedido...

“Cuando era chiquita, jugaba mucho a la tan famosa búsqueda del tesoro, creo que lo emocionante era el final, cuando realmente encontrabas ESO que en el juego era el tesoro, la búsqueda en el juego se daba obligatoriamente, porque de eso se trataba, pero la búsqueda en la vida a veces pasa y a veces se frena, pero no se frena por nada…

Algunas, o tal vez una sola vez en la vida esa búsqueda por el tesoro se frena cuando lo encontramos… cuando lo miramos y en el momento sabemos que ESO es lo que buscábamos y no otra cosa…

No siempre sabemos lo que buscamos, no siempre estamos seguros de que lo vamos a encontrar y muchas veces nos planteamos la idea de que jamás va a aparecer… Pero hoy puedo decir que lo encontré, que en un momento muy inesperado, encontré eso que buscaba, encontré lo que tanto esperaba…

No creí, cuando lo vi, que se iba a convertir en algo tan importante, en algo prácticamente increíble que a veces puede parecer irreal, porque supera lo que siempre imaginé, lo que siento ahora supera mis propias expectativas, tanto que ni siquiera puedo describirlo… Me voló el mundo en un instante, fue como encontrar un pedacito de luz cuando creí que ya no daba más, que no podía seguir aguantando lo malo, y llegó… y tanto lo esperé que ahora no puedo creer que lo tenga...

Creo que tan acostumbrada estaba a equivocarme con mis elecciones, a dar con una piedra en lugar de un tesoro que ni siquiera puedo concebir la idea de que ahora sí es real, que ahora sí puede ser diferente… porque sí, es diferente, es especial, es ilógico, es raro, pero es eso que siempre quise, y es mejor a como siempre lo soñé… "